martes, agosto 28, 2018

No es oro todo lo que reluce, ni al que madruga le amanece más temprano.

No es oro todo lo que reluce,  ni al que madruga le amanece más temprano.

TFN.  7.15 am.
Servidora súper contenta porque tiene a un guapo de compi de asiento.

Avión 7.18 am.
Alucifliping. Chico guapo se rasca la nariz... digámoslo así... un desliz lo tiene cualquiera...

Avión 7.22 am. Avión en el aire. Igual que la mano de mi compi lector, que debe estar nervioso... digo yo, y nuevamente va a atacar a lo que sea que le esté molestando en la napia

Avión.  Ni sé la hora. Y ya he perdido la cuenta de las veces que el colega de al lado se ha metido el dedo en la fosa nasal derecha, ha hurgado, rascado, sacado, hecho bola y proyectado hacia la alfombra...

Avión.  No puedo concentrarme en mi lectura, estoy obnubilada por el personaje del asiento de al lado... lee en sueco... o similar, reconozco alguna letra tipo catálogo del Ikea... Yo no entiendo nada, ni del libro,  ni de que este semimoreno, semicanoso, ojos relativamente saltones, sacamocos pueda ser suecos (imagen mental de un sueco : Thor)

Fila 23. Asiento F.
No sé cómo ponerme ya.  Pierna pa'cá, pierna pa'llá. Estiro las piernas,  las encojo... al final me doy la vuelta y me pongo de rodillas en el asiento,  como si fuera a hablar con el viajero de la fila de atrás. Y por fin pierdo de vista al mocoso y resisto mis ganas de ofrecerle un kleenex.

Cubículo volador.  Hora de aterrizar. 
Me toca sentarme bien. Visión periférica activa: lector lanzador de sequedades de la mucosa nasal cierra su libro, recoge su mesita, se lleva la mano a los pantalones (por decir algo), se aprieta y estira las piernas. 😳
Muero y sufro un ataque de tortícolis repentino y agudo hacia el lado de la ventana, que no cesa hasta que el avión está casi vacío y que el vecino hace rato que se ha ido.

Moraleja. No es oro todo lo que reluce.
Y chico guapo... ni tan guapo, ni tan limpio...

Besis proyectados desde aquí .
Geisha escrupulosa.

lunes, agosto 27, 2018

LIKE A LAST HOLIDAY MONDAY

Año 2018. ¡2018!
Aeropuerto TFN, 6.30 AM.
Mujer española,  adulta,  arregladita, termina de usar su kleenex y lo lanza al suelo.  ¡Lo lanza!
Los que pasamos alrededor la miramos estupefactos. Podría ser que se le ha caído.
No. Lo ha lanzado.
Yo, que soy tímida, le digo con mi cara de 6 de la mañana de mala persona sin maquillar que "se le ha caído".
Se miran ella y su hija adolescente y me vuelven a mirar.  Sólo les falta sacarme la lengua.
Flipo, súperflipo e hipermegaflipo.
Qué ganas tiene la gente de sacarme el mal humor el último lunes de vacaciones, 
camini - - to de BCN.
Entre esto, que el avión va petado, con lo que la cola de facturación ha sido de película de terror, tipo luz al final del túnel. Me ha dado tiempo de quitarme las sandalias, los abalorios,  sacar la tablet y la minimicrobolsa de los líquidos (hay una confabulación en mi contra) y salir corriendo hacia el corte de seguridad (aquí no hablaré de carros atascados en el lector de rayos equis, señores que se dejan monedas en los bolsillos y pitan, señoras que no entienden que se tienen que quitar los zapatos e interrumpen la cola, ni esa gente tan solidaria que se empeña en vestirse justo, justo al lado de los policías según salen sus pertenencias... por qué... ¡por qué! ).
He llegado bordertime a la cafetería.  Cafeeeeé.
Cola.
Cola.
Cola.
La cola no avanza.
Señora mayor detrás de mí coge botella de agua. Hace la cola.  Se lo piensa. Se pone en el mostrador.  Un rato.  No le cobran. Se va con la botella de agua en la mano, hacia la puerta de embarque... la misma que la mía.
¡Están embarcando!
Abandono la cola.  Cafeeee. Ahora envidio a la señora.
Aquí tampoco hablaré de esa gente de la fila 5 que se empeña en entrar cuando están llamando a los de la fila 20...
En la cola me encuentro con mi amiga del kleenex... uiuiui... música del oeste.
Por fin mi sitio. ¡Ventana! ¡Chico guapo! (Y leyendo un libro... muero...)
Puaj, al pasar a mi sitio he tocado la cabeza sudada del señor calvo del sitio de delante... eso tiene que ser para suerte o algo... pleeeeaaaase.
Despegamos.
¡Deseadme suerte!

Besis volados.
Geisha on board.